En las dos notas anteriores, acerca de Quillota y los quillotanos en los años 1890 y 1891, hemos nombrado varios balmacedistas y algunos opositores a nivel local. Entre los últimos, la telegrafista Celinda Arregui, que estaba al servicio del Comité Revolucionario clandestino, presidido por el médico Joaquín Iglesias Baeza.
El periódico “La Sociedad”, que circuló desde junio de 1890 (su editor era el sastre Ricardo Jara) centró sus críticas en Teodosio S. Figueroa y en Reginaldo Calderón Ayala del semidiario conservador “El Quillotano”, y en Agustín Edwards Ross, del partido nacional o monttvarista, tenaz opositor de Balmaceda.
Don Teodosio, Lorenzo Astorga, el cura José Martín González y otros caballeros conservadores fundaron “El Quillotano”. Figueroa fue alcalde de Quillota, dos veces, y gobernador.
“La Sociedad”, que se definió como “Órgano del Partido Democrático y clases trabajadoras”, en su Nº 10 dio a conocer el Directorio del partido Democrático de Quillota, encabezado por el, presidente Ricardo Jara: Rafael Cortés, Antonio Latoja, R. Zamora R., Fermín Olivan, Antonio Ahumada, Manuel Carreño, Manuel Fuenzalida, José Pacheco, Elías Indas, Manuel Ramos, Guillermo Turgat, José Salinas, Fructuoso Fernández. Sabemos también, que uno de los oradores del partido era el joven Federico Vargas Gac. La militancia partidaria era de origen artesanal, obrero y de clase media.
Según el historiador Sergio Grez Toso, “…, los demócratas de Quillota expresaron su apoyo al gobierno durante el último trimestre de 1890 en franca contradicción con la línea adoptada por los dirigentes nacionales”.
En el Nº 2 del semanario se informa sobre la Sociedad de Artesanos “Juan Agustín Cornejo” (58 miembros) y en el Nº 7 hay una “Reseña Histórica de la Sociedad de Artesanos de Quillota y de los hombres que por sarcasmo se han llamado sus sostenedores”.
En las noticias no podía estar ausente la huelga de panaderos del viernes 25 de julio (Nº 8).
El Nº 10 es interesante: hay dos textos del redactor Luís Astudillo (uno sobre el liberalismo) y se alude al abogado Zorobabel 2º Rodríguez Rozas, hijo del diputado conservador, entre otros temas.
Del club político opositor monttvarista de la calle Dieciocho y Baroncito, informa el Nº 17.
Por el Nº del 23.11.90 sabemos que el gobernador era Jerónimo Espinosa Varela y los alcaldes: Francisco Herboso (primer), Juan Rencoret y el señor Cabrera.
Una crónica nos cuenta que “avivaron a Balmaceda en la estación 2.000 personas”.
“Cazoleto I, Rey de Quillota” era uno de los blancos de “La Sociedad”. El apodo alude al diputado suplente Enrique Cazotte (1).
El 5 de enero de 1891 apareció el último número (el 30) del periódico demócrata.