Quillota es
el importante, para nosotros, común denominador vital de los personajes
vinculados a nuestra ciudad objetos de
esta nota. Entregaremos algunos datos biográficos basados en textos, muy interesantes, que
nos han proporcionado últimamente.
Ambrosio
Valdés Carrera, nacido en Santiago en
1843, era nieto de José Miguel Carrera,
padre de Javiera Carrera Fontecilla. Al iniciarse la guerra civil de 1891 el
Presidente Balmaceda lo designó
gobernador del departamento de Quillota donde Valdés poseía dos
fundos, uno de ellos “El Grillo”. “Allí – anota el periodista Juan Arellano (1) – organizó con
toda serenidad i acierto la defensa del
departamento, construyendo caminos
a la costa, estableciendo postas de caballos
para facilitar las comunicaciones, i colocando telégrafos
desde Quillota, a las Caletas más
importantes”.
“Mantuvo con
recursos propios…, un destacamento permanente, destinado a resguardar esos puntos”.
Después de la derrota de los balmacedistas sus
dos fundos fueron asolados por
completo y la gobernación saqueada.
Sobreponiéndose
a la derrota y a las pérdidas materiales, Valdés Carrera
encabezó el partido
liberal democrático o
balmacedista en el departamento y, con el
seudónimo de Amvalca, expresó
su pensamiento en el periódico
“El Correo de Quillota”. En 1898
fue gobernador de Coquimbo.
Valdés, también,
es autor de biografías de Manuel Rodríguez, Ramón Freire,
Blanco Encalada y Prieto, y de opúsculos
genealógicos.
El segundo de nuestros personajes, Luís Alberto Garín Ávila, nació en Cauquenes el 30 de abril de 1863, hermano del capitán de
navío balmacedista Emilio J. Garín. El
trágico vínculo del comandante Garín con
Quillota es su asesinato a principios de
septiembre de 1891, tras el triunfo de
las fuerzas anti balmacedistas. Aníbal Bravo K. nos
informa (2): “El teniente coronel don
Luís Alberto Garín, 2º jefe del
regimiento Húsares de Santiago fue
también hecho prisionero; y
trasladado a Quillota fue llevado al cuartel de Pisagua Nº3 y sin ningún
proceso fue ultimado a balazos cerca de la plazuela de la Recova ”. (6 de septiembre).
En un importante
y apasionado folleto de 1894 sobre los asesinatos del ministro Aldunate Solar y
de los comandantes Villota y Garín, el capitán ayudante Carlos Baeza Yávar afirma que Garín falleció en la noche del 4 de septiembre (3). ¡Tarea para
investigadores!
Al capitán Baeza lo salvó de la muerte un pariente lejano, médico de ciudad de Quillota, Joaquín
Iglesias Baeza, presidente de la junta opositora de Quillota, fallecido ocho
días después.
Garín
participó en casi toda
las batallas de la Guerra del Pacífico,
incluidas Huamachuco, Chorrillos y
Miraflores.
Newman firmaba como Franzisco Enrrikez
Con Carlos
Newman Andonaegui (Santiago,
1862-Viña del Mar, 1928) pasamos de
la muerte a la vida, del odio
al saber. Este hombre de ciencia, filólogo, erudito, discípulo y
admirador de Charles Darwin y Herbert Spencer, fue propietario de la Finca de Andonaegui, ubicada
en calle Serrano Nº29 de Quillota, donde
vivió y editó libros. Con su amigo quillotano Carlos Cabezón fueron
introductores de la ortografía racional o fonética desde 1892, que por ejemplo,
reemplazaba las letras c, q por la k y
la r por la rr: finka, Killota, Karlos Kabezón, rracional, Enrriquez. Newman y
Cabezón estaban insertos en “un cierto movimiento neográfico de ramificaciones
internacionales” (4).
.
Nuestro personaje
estudió en el Colegio de Los
Padres Franceses y en el Liceo de Valparaíso. Como autodidacta,
Química, Matemáticas, griego, latín, inglés, alemán y francés. Leía y hablaba
los tres últimos.
“El querido e
inolvidable profesor”, persona acaudalada, era, además, un filántropo.
Fue un generoso protector de la “Revista chilena de Historia Natural” (5).
Su viuda, Paulina Bernard, donó su valiosa y
nutrida biblioteca a la
Universidad de Chile.
1) “Los periodistas de la Democracia ante la Historia ”, Juan Arellano i
Yecorát, Biblioteca de la
Juventud , Imprenta Vicuña Mackenna, 1894.
2) “La revolución de 1891: relación histórica en
vista de los partes oficiales, documentos de la época, y datos recogidos
personalmente”, Aníbal Bravo K., Santiago, 1946.
3) “Páginas de Sangre de la Revolución de 1891” , Carlos Baeza Yávar, Buenos
Aires, 1894.
4) “Tradukzión i rrebelión ortográfika”, Gertrudis
Payàs, Universidad Católica de Temuco, Chile en TRANS. Revista de Traductología,
Universidad de Málaga, número 12, Dossier pp 14 -28, 2008.
5) Así se consigna en la Nota Obituaria contenida
en la Revista Chilena
de Historia Natural, 1928.